jueves, 3 de septiembre de 2020

sin geocaché

Soy una máquina, según acabo de publicar la entrada cojo y la elimino, así, porque yo lo valgo.

Ea! A repetir!!

Empezamos el día con la visita del ratoncito Pérez

El muy pillo deja los regalos repartidos y escondidos por la casa y hay que andar buscando.

Le trajo un juego de 12 figuritas de yeso de animalitos para pintar con témperas y dos huevos sorpresa de Pin y Pon pero de mascotas.

En mis tiempos te traía 100 pesetas y ya era pero bueno como (creo) que es la última vez que viene pues debió ser por eso que iba tan cargado.

Después, a la tarde, fuimos de nuevo en busca del caché del cabo Prim.

Para empezar pasé de las indicaciones del gps y continué por mi carretera amplia de doble sentido y, efectívamente, la cruz se encontraba a pocos metros de donde nos desvió la vez anterior.


Después, según indicaba aquello, era una caminata tranquila de 20 minutos ¿¿¿¿?????

JO-PETAS!!!! Es una bajada por un camino de cabras que para una bola vieja, cegata y con sandalias de playa se hizo interminable. Y además literal porque de 20 minutos nada y cuando vi que nos quedaba tanto como lo que llevábamos andado y que nos quedábamos sin luz, aborté misión y no veas tu que maravilla de vuelta, todo cuesta arriba 👀

Eso sí, las vistas preciosas





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